Sí, esta es la web oficial de David Testal, fundador de la NoEscuela y Las Puertas, el viaje online definitivo, concebido para que te libres de todo peregrinaje «terapéutico», toda búsqueda «espiritual» y todo interminable proceso de «autoconocimiento». 

Cada día es una nueva oportunidad para cosas que aún no concibes.
Te escribo para recordártelo.

Lo último ↓

Recibe un correo diario sobre el arte oculto de la libertad.
Sólo si asumes las consecuencias. Si te asusta mucho, te das de baja.

[ Con el primer correo accederás de inmediato a un vídeo secreto y endemoniado ]

Hay un arte oculto que pocos logran conquistar. La mayoría ni siquiera sabe que existe.

Te lo ocultan tus padres,
sin mala fe, porque no lo conocen y lo temen.

Te lo ocultan en el colegio,
porque el sistema educativo fue diseñado para ocultarlo.

Te lo ocultan en la universidad,
porque las carreras fueron diseñadas para que agradecieras tu esclavitud.

Te lo ocultan los políticos,
para poder seguir viviendo a tu costa.

Te lo ocultan los gurús,
para que sigas buscando tras ellos lo que ellos no pueden darte.

 

Si no lo desarrollas, no conocerás tu poder.
Serás cada vez más débil y pusilánime,
un incordio para los demás,
en vez de ser apoyo y fuente de prosperidad e inspiración.

 

A mí me llevó muchos años y ahora intento compensar todo ese tiempo haciendo que tú lo descubras lo antes posible.

Existen 3 tipos de persona.

Y aunque puede sonar a simplificación absurda,
te aseguro que no hay escapatoria:

  1. La que tiende a buscar poder sobre los demás (que acaba siendo esclava de sus esclavos).

  2. La que tiende a buscar ser protegida y cree tener derecho a que la sostengan sólo por existir (que acaba esclavizada por quienes le venden ese derecho).

  3. Y la que espabila de una puta vez y busca poder sobre sí misma (que deja de ser esclava y se convierte en alguien realmente benéfico para los demás).

 

Escribo sólo para esta tercera persona, es decir: para quien aspire a ser cada vez más LIBRE, NOBLE Y VALIENTE. Los tres pilares sobre los que se fundamenta mi concepción de la verdadera Magia, que hunde sus raíces en una tradición olvidada.

Pero la libertad asusta, te lo advierto.

Y requiere de tu valor para asumir toda la responsabilidad. Si no hay esa voluntad, no puedo ayudarte y te recomiendo que no pierdas el tiempo leyéndome. Pide mejor una subvención o mendiga por un título o un empleo o un premio o haz una oposición.

Recibe un correo diario sobre el arte oculto de la libertad.
Sólo si asumes las consecuencias. Si te asusta mucho, te das de baja.

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Algunos de los testimonios que recibo diariamente:

«En honor a la verdad, estaría escribiendo correos de agradecimiento todas las semanas, pues todavía no me he encontrado con ninguna en la que, como mínimo una vez, no me haya conectado con esa profundidad de lo cotidiano y haya causado, llamémosle «algo», en mí (y digo como mínimo una con todas las de la ley, porque en la mayoría de ellas son más de una)».

«Gracias. Gracias en loop. Infinitas. Te leo cada día, y siempre sintiendo que cada mail es una fortuna. Me encuentro con Dios, con la vida y con mi deseo en cada lectura. Aplico todo. Todo. Y cuando tengo el día ‘ñeh’ es sólo porque se me ha olvidado lo que he leído. Entonces regreso, como quien acude a un altar sin pedestales, a rendirme sin derrota a esta magia. Y recuerdo. Y todo esto se sigue transformando en actos. Y sólo puedo agradecer y agradecer y agradecer. Te estoy profundamente agradecida por este regalo diario que nos haces. Qué fortuna».

«Gracias a este correo he podido recordar que la heroína ya habitaba en mí desde hacía décadas y que no me había parado a verla y honrarla.
Y ya, no puedo hacer como que no está ahí. 

Ya no puedo eludir, ni quiero, la responsabilidad y el compromiso que ello conlleva.

Así que, GRACIAS INFINITAS por tu tenaz y persistente labor, maestro».

«Solo hace tres días que recibo tus mails, tres mails y casi dos horas de video «el demonio» y ya todo ha cambiado.
Agradezco enormemente todos tus escritos, porque me sienta bien con ellos o no no, me están haciendo mejor humano y estoy aprendiendo muchísimo. me permite ver mi interior con una luz más clara».

«Gracias por escribir lo que necesitamos leer para elevarnos, me alucina tu gran capacidad perceptiva. Seguiré leyéndote atentamente hasta el final».

«Gracias David, lloro como una niña a la que por fin se le ha pasado la rabieta, con esto que acabo de leer ahora y con tu libro, sea cuál sea la página que lea, al «azar». Gracias por todo lo que haces».

«David, eres grande… Gracias por aportar tantas cosas bellas… solo con leerte eres capaz de cambiarme el chip en segundos…».

«Gracias por tanto desde Argentina. Me ayudaste tanto. Dios me mando tan espectacular ser humano».

«Gracias por remover, por rescatar, por estar y no hacernos sentir ridículos, sino por hacernos sentir acompañados de que hay muchas personas como nosotras, capaz de dejar las opiniones vanas a un lado y seguir el camino del bien, para ver el esplendor».

«David haberte encontrado hace tan pocos días, es como que la vida me dijo…ahora….vamos…es tu momento….disfruta la LIBERTAD!!!! En mis muchos años por este planeta, no sabía que alguien pondría en palabras todo mi sentir y  que felicidad. !!!… cuánto aún por aprender! 

Me da mucha ilusión, abrir el correo diariamente y encontrar allí tus sabias reflexiones tan bellas y simplemente expresadas».

«Gracias, David, por traer la magia de nuevo y darme fuerzas para continuar. No sabes las veces que oigo en mi interior tus palabras de «no te rindas. Sea lo que sea por lo que estés pasando, sigue». Por favor, no pares de recordárnoslo…».

«Me flipan tus correos, en cada uno me doy una hostia de realidad».

«Maravilloso. Gracias por donarte con tanta creatividad cada día y salvar a todos lo que quieren ser salvados haciendo que se salven. Gracias por esparramar tanta capacidad, tanta inspiración».

«Gracias por tu compromiso y generosidad. Recibo cada mail tuyo con la ilusión que se tiene al abrir un regalo que viene de alguien que sabes que te quiere y pensó el regalo a conciencia. Luego, algunos me ayudan a recordar, me conmueven, otros me incomodan y remueven ó me iluminan una pequeña parte de oscuridad…ninguno me deja indiferente».»

«Cada vez que te leo, me comprometo a digerir y aplicar lo aprendido. Así que ten por seguro que estás haciendo muchísimo bien, a mi y a mi entorno, más del que imaginas».

«Cada mañana, al despertar, una de las primeras cosas que hago es leerte y sí no encuentro el tiempo y espacio adecuado, lo busco hasta conseguirlo y, otras veces, los vuelvo a leer».

«Enorme lo que regalas cada día. Qué nivel de exquisited, de elegancia… Qué valor para desnudar y defender la verdad. Grande, grandísimo, elegantísimo. Tu aporte es pura magia. Eternamente agradecida».

«Derramas verdad ahí donde más duele. Pero esa verdad actúa como desinfectante que arde en un inicio pero evita infección posterior. Soy más libre desde que te leo».

«Estoy flipando mucho con esta nueva perspectiva de vida, es como la libertad más allá de la estrechez de la anarquía, de Giner de los Ríos, el librepensamiento y un largo etc de corsés. Es la libertad mucho más amplia y más libre (válgame la redundancia). A veces pienso de dónde saca este tío estos razonamientos…».

«Me ha fascinado tanto el mail de ayer que yo pagaría por tener estos escritos en un libro aunque ya los tenga en mi mail. En serio. Gracias por maravillarme así! Pocas personas me estimulan de esta manera».

«Quiero que sepas que muchas de tus palabras y reflexiones me acompañan en mi día a día. Me has ido enseñando a entender la vida de otra manera. Y por eso quiero darte las gracias. Unas gracias eternas. Nunca voy a olvidar lo que has hecho por mí».

«La puta que parió a Panete! Gracias a tus escritos y vídeos, durante la covid, empecé a cambiar el rumbo en mi vida (concreción y acción). Estaba muy perdida dejando mi dinero, mi fe y voluntad a los demás. Me metí en un agujero negro yo solita. Celebro tu claridad y que expongas sin titubeos la verdad. Me has hecho bien».

«Es un rayo de lucidez. Apelas a la responsabilidad y a la libertad íntima, y entender eso lo cambia todo. Dices cosas radicalmente distintas a todo lo que te llega por ahí y a lo que la mayoría llevamos “de serie”. Esta newsletter la recibo con inquietud e ilusión a partes iguales. Es un maravilloso regalo lo que compartes».

«Darte las gracias por compartir estas joyas que son tus emails, disfruto de leer ‘verdades al desnudo’. Me ha ocurrido varias veces leyendo estos correos que hay frases que quiero recordar con el tiempo y creo que pueden servir también a los demás leerlo».

«Estas perlas mañaneras… Que todos los Dioses conserven tu lucidez y generosidad».

«Gracias David. Se que te agradecen cada día el regalo que eres para todos los que te escuchamos y seguimos… Es una puta maravilla tu existencia y tu compartir….a mí me ha cambiado la vida….».

«Gracias por tanta grandeza y exigencia en tus palabras. Te sigo leyendo, lo seguiré haciendo y si algún día me molesta, te leeré más».

«Me encanta leerte, siento que es un regalo inmenso. Leo tus escritos que me llenan y me encantan… Siento tanta verdad en lo que dices !!! Agradezco enormemente tu compañía, con ganas de leerte cada día… Me reservo el tiempo necesario para leerte como te mereces. Un espacio tranquilo y único, y con ganas de saborear lo que lea y lo que venga. Gracias, gracias, gracias por todos y cada uno de tus textos gestados desde el amor, la verdad y la humildad!».

«Son muy buenos los correos. ¡Me están encantando! Y eso que sólo leo la newsletter…».

«Por caUsalidad llegué a ti la semana pasada y me inscribí en el envío de tus correos.. Lo recibí expectante.. y, como si de un milagro se tratase, me encuentro de sopetón con el tema que ocupa mi alma y las noches de desvelo. Me ha dado mucha paz. Estoy convencida de que ese planteamiento sería (o será) la verdadera r/evolución social que tanto necesitamos .. la fórmula para trascender y no seguir perpetuando etiquetas».

«Enamorada de tus escritos como misiles que atraviesas mis pensamientos y calman mi sentir. Agradecida de que sea a diario».

«Leerte todas las mañanas expande mi consciencia… transforma mi tiempo en un momento mágico eterno, único e irrepetible… vuelos y vuelcos en mi mente que me inspiran fortaleciendo mi alma para empezar cada dia… reafirma quien soy y hasta donde puedo llegar… Confirma que podemos SER grandes, dentro de esta rica, única y diversa Humanidad. Hace años pase por todas y cada una de tus PUERTAS. IRREPETIBLE. Más que magia. Gracias por el recuerdo cada día. Gracias. Gracias».

«Gracias de todo corazón por tu entrega y por el impacto tan positivo que generan en mí tus palabras».

«Hace ya unos emails que quería contestarte con un GRACIAS enorme. Espero con entusiasmo el ratito de la mañana dedicado a leer el email que nos mandas. ¡Gracias por tantísima generosidad!».

«Este texto me ha llegado al alma, David. Gracias por escribir cada día y por tu esmero».

«Darte las gracias por tu generosidad al escribir. Tus correos me hacen replantearme muchas cosas, me inspiran, me inquietan a veces, otras me llenan de energía, me generan preguntas y cuestionarme… y eso me gusta mucho. La verdad es que para mí son un regalo. De nuevo, muchísimas gracias! Me alegro de haberte encontrado por el camino!».

«Lo que siento es un agradecimiento enorme por tu valentía, tu forma de hacer las cosas, de una forma u otra siempre acabas estando. Eres como una gota malaya en la consciencia, o así lo veo yo».

«Es un hermoso e inspirador ejercicio el que nos regalas cada día».

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Puedes saber más sobre David aquí.

EL ARTE OCULTO
DE LA LIBERTAD

[grandeza]: haz esto o muere

Verás, hay momentos en la vida que pueden convertirse en hitos, en rubicones, o pueden desaparecer para siempre como lágrimas en la lluvia. Hay momentos que podemos decidir convertirlos en memorables o en olvido, en allí donde empezó todo porque fuimos al fin valientes o en allí donde volvimos a dejarnos llevar lejos del miedo, donde volvimos a poner excusas y a «fluir» como peces muertos, a posponer, a decir mejor la próxima vez, cuando las condiciones sean las que creo que deberían ser o no esté tan liado o me sienta mejor o haya arreglado ciertas cosas o blablabla… siempre es lo mismo, lo he visto durante años miles de veces, no te exagero. Miles. Poner como requisito previo para mover el culo lo que sólo puede darse como consecuencia de moverlo. Decía siempre Punset que el ser humano tiene una capacidad prodigiosa para hacerse infeliz.

Y esos momentos en los que, en el fondo de tu corazón, sabes que fuiste mezquino y pusilánime, no suelen enseñarte nada, puesto que sueles barrerlos bajo la alfombra de tu consciencia para que no te duela recordarlos.

Y como prefieres consumir entretenimiento, en vez de prestar atención a lo que no estás haciendo, o prefieres quejarte de un trabajo que ya te hastía, convirtiéndolo en otro culebrón más que también te entretenga, evitas sentir ese dolor que te recordaría cómo vas hundiéndote en la empobrecedora inercia más y más. Y al no querer sentir ese dolor y, por tanto, no permitirte recordar, repites lo que te hunde, haces lo mismo que te daña una y otra vez, vuelves a dejar lo que importa para otro día, para una «mejor» ocasión, para cuando estés más «tranquilo», para la siguiente oportunidad.

Pero esa otra oportunidad no existe y lo sabes. Es ahora o nunca. Sí, ahora o nunca. Y tienes toda tu vida, sea lo que sea que vaya a durar, por delante. Pero la tienes ahora. O nunca.

Dices no sentirte capaz de asumir ahora tal compromiso con lo que supuestamente amas o te importa, cuando sólo el compromiso te capacitaría, supusiera lo que supusiera, y demostraría que lo amas o te importa. Mientras pospones el compromiso, como un niñato, a ti mismo te incapacitas. Pero tú sigue, sigue usando como excusa para no atreverte la consecuencia de no atreverte, que seguro que si lo piensas muy fuerte acabas creyéndotelo.

Dices no atreverte a apostar aún por lo que sueñas, ya que no te sientes a la altura ni merecedor de ello, que temes la frustración. Cuando sólo serás merecedor de aquello por lo que te atrevas a apostar y sólo estarás a tu propia altura cuando honres tus sueños no posponiéndolos, no despreciándolos diciéndote que habrá un mejor momento para ellos.

Porque la ansiedad no se soluciona intentando evitar la frustración, todo lo contrario, se soluciona buscándola sin cesar, hasta el final, disfrutándola como una guía, asumiendo que debes lidiar con ella de por vida si quieres hacer posibles cosas cada vez más nobles, efectivas y bellas, que requerirán que te arriesgues y equivoques muchas veces.

Dices que quieres demostrarte a ti mismo que puedes lograr solo, sin aliados, lo que no has sabido lograr hasta ahora, cuando es ese orgullo el que ha alejado de ti ese logro, por no entender que la fuerza de voluntad no excluye la inteligencia para seleccionar a quienes quieras que te den la mano en el camino ni la humildad de reconocer lo que aún no conoces ni eres capaz de concebir sin medirte junto a alguien que te rete a ir más allá de ti mismo.

Dices que lo sientes, con cara de compungido, que te va a ser imposible al final lograrlo. Cuando simplemente te has rendido al primer mínimo contratiempo, o al segundo o al tercero o al cuarto, da igual, ahogándote en un minúsculo y ridículo vaso de agua. Cuando la verdadera fuerza se despierta sólo si te propones intentarlo hasta el último segundo, hasta el último aliento, hasta el fin del mundo si fuese necesario. Cuando no has esperado, bajo la lluvia, cien años a las puertas del templo antes de ser recibido. Cuando no te has atado al mástil para que ninguna duda te desvíe. Cuando no has honrado con tu tenaz constancia y tu obstinación lo que dices anhelar más que nada en el mundo.

Haz el favor de erguirte mientras descargan sobre ti toda la artillería y seguir caminando hacia tu objetivo. Que sólo la muerte pudiera pararte. Nada que se precie en la vida merece menos que eso.

Dices no tener fuerza ahora para enfrentar tal responsabilidad, cuando esa fuerza que esperas sólo se despertará en ti cuando asumas esa responsabilidad.

No seas estúpido, en serio, yo lo he sido durante mucho tiempo, durante gran parte de mi vida. Te vas a morir. No es verdad que sepas que lo harás en algún otro momento. No lo harás si no es ahora, pues no habrá otro momento para hacerlo. Las oportunidades son únicas, las dudas y las excusas son eternas. Y sólo sabes que ahora estás vivo y que ahora sí tienes la oportunidad para marcar la diferencia, para tomar una decisión que engrandezca tu experiencia, para jugarte la piel… joder, esa sensación es la hostia, eso es estar vivo. Y no, no habrá otra oportunidad como esta. Como ahora. Bien merece una aventura estar vivo.

 

Que hoy veas el esplendor.
David.