Sesiones privadas

Cuando se trata de problemas personales, David ofrece sesiones únicas, largas y profundas, individuales o para parejas. La duración no se fija de antemano, pues dependerá de cada persona y del momento y, por ello, requiere comprometerse a quedar totalmente disponibles, sin compromisos posteriores.
 
Cuando se trata de asesorías en comunicación o de mentorías dirigidas al desarrollo creativo y estratégico de cualquier tipo de proyectos, el número de encuentros dependerá de las cualidades de cada caso, por lo requerirá una auditoría previa para poder pactarlo.
 
Actualmente, las sesiones privadas con David están muy solicitadas con respecto al tiempo que puede dedicarles y no sabe hasta cuándo podrá hacerlas, por lo que cuanto antes te decidas, antes podremos reservar una fecha y asegurarte su compromiso.
 
*Se firman contratos de confidencialidad para personajes públicos cuando así se requiera.

EL TAROT COMO
ESTRUCTURA IMPLÍCITA

«Al igual que lo que experimentamos como realidad, El Tarot también es un lenguaje simbólico, tan profundo y complejo como sea la percepción de quien se adentre en él en cada momento. 
 
Hace la función de espejo mágico que refleja todo lo no enfrentado o reconocido y, por ello, hace posible articularlo, atrayéndolo hacia la claridad, introduciéndolo en una estructura narrativa que obliga a darle un sentido concreto y útil que permita asumirlo, resolverlo o mejorarlo.
 
Sirve para, sin negar los hechos y a partir de ellos, contarnos historias benéficas que sustituyan a las nocivas que estábamos asumiendo. No sirve para adivinar el futuro, porque es imposible adivinar algo aún no decidido. En todo caso, en el futuro habría innumerables potenciales y el Tarot podría ser utilizado para dirigirnos hacia los más ennoblecedores, pero centrándonos exclusivamente en comprender el presente y en despertar la fuerza necesaria para tomar la decisión o la actitud liberadora que corresponde a cada momento, habilitándote a coger firme el timón en medio de cualquier tormenta.
 
Aunque toda sesión, según he comprobado en innumerables seguimientos a consultantes, suela tener efectos terapéuticos inapelables sostenidos en el tiempo, no considero que se trate de una terapia, sino de una disciplina artística consistente en crear encuentros únicos y efímeros, concebidos para inducir profundas tomas de consciencia que comienzan a transformarnos desde ese instante, impulsándonos a responsabilizarnos de nuestra vida.
 
Siendo un arte, y aun teniendo una inspiración evolutiva de base, he ido enriqueciendo las sesiones con otras investigaciones en diversos campos a lo largo de los últimos 20 años, con la intención de hacer las sesiones cada vez más efectivas y proporcionar una experiencia decisiva que pueda ahorrarnos mucho tiempo de procesos terapéuticos y búsquedas espirituales infructuosas. Por lo que el Tarot, como objeto, ha ido teniendo cada vez menos presencia explícita, siendo innecesario su uso la mayor parte de las veces».
 
· David Testal ·

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